- ¿Viste lo que pasó con H.G.? -me dice.
Intento recordar de quién me habla. Dudo.
- H.G., H.G... Me suena -le digo.
- Boludo, el que cursó con nosotros el año pasado.
- Tal vez recuerde la cara ¿Cuál de todos era?
- El flaquito, pelo larguito, ¿no te acordás?
- ¿El que laburaba en el Ministerio de Trabajo?
- Ese, ese mismo.
- ¿Qué le pasó?
- Se mató la semana pasada. Fue él... El que llamó al comando y luego se pegó el tiro.
Me quedé helado. Habíamos leído la noticia en el diario la semana pasada en la oficina. Pero claro, yo nunca presté atención al nombre. Resulta que el flaco llamó avisando al comando radioeléctrico desde su teléfono celular, estaba en su auto en alguna parte de la ciudad. Como todos los suicidas no tan decididos se ve que llamó para escuchar a alguien, alguien que lo hiciera cambiar de opinión. No lo lograron.
El flaco andaba en sistemas también, laburaba de esto. Recuerdo que antes de entrar a clases se lo notaba siempre como distante, apartado, siempre serio. Pero cuando te saludaba sonreía, tenía un apretón de manos firme, esos con la fuerza justa. Por lo demás no hablaba mucho. Salvo en las clases de teología donde más de una vez me senté junto a él. En esas clases siempre participaba, opinaba, debatía, pero nunca con una posición cerrada a pesar de parecer agnóstico, digo parecer ya que en aquella materia nunca se nos hizo responder en forma directa sobre nuestras creencias, más bien se encaraban los temas a tratar de una, después de todo nuestras opiniones dejaban en claro nuestras posturas al respecto. Recuerdo que más de una vez sus preguntas hicieron pensar a nuestro profesor. Le fue bien en los parciales, se ve que la materia le interesaba de verdad. Al final del curso siempre preguntaba mucho sobre Dios, como que los temas que tratábamos lo hicieron pensar bastante al respecto. Pensar, pero pensar a veces no es suficiente. Ya que pensar no es sentir. Es diferente, y en esa diferencia radica todo el quid de la cuestión en estos asuntos, ya sea que sientas que sí o que sientas que no.
Pero bueno, es que todavía no caigo. Tenía un trabajo fijo, estable, no parecía tener problemas económicos (onda universidad privada, nos cobraban $240 al mes por sólo 6 hs semanales de clase). Pero claro, esto es lo material, lo menos importante, y es que de su vida nunca supe nada. ¿Quién era él realmente? ¿Tendría algún amor? ¿Tendría una familia que lo quisiera y a quien él poder querer? No sé nada, y ya nunca lo sabré. Al final nunca hicimos ese asado a fin de año ¿Y si hubiésemos quedado amigos después de una borrachera? ¿Y si hubiésemos formado una amistad? Si hubiera sido así yo me hubiese aprendido bien su nombre. Pero los hubiera, los hubiese y los hubiésemos no existen. Joder, como me duele escribir esto último.
En el momento final, el flaco apretó el reset. Desapareció. Se hizo uno con la fuente. Decidió reinicializarse o finalizarse, dependiendo de cómo lo sientas, en este complejo gran sistema que llamamos vida. Ahora tal vez ya sea otro objeto diferente, uno más, con otras propiedades, otros métodos, otras implementaciones; o si te gusta más: otra variable más alimentada nuevamente al sistema, claro, ya con otro valor. O no sé, tal vez prefieras creer en que H.G. ya no es nada.
objHG = Nothing
Ahora, en cuanto a mi, bueno, yo siento que, al menos en principio, tuvo su reencuentro con aquello que siempre estuvo con él, dentro de él. Aquello que alguna vez intentó entender, cuestionar, debatir, pero nunca cayendo en el absolutismo de negar. Llamale como quieras, que hoy acá no hay nombres, no hay religiones, no hay dogmas absolutos, no hay rituales, no hay devociones; sólo están los distintos caminos que sentimos que algún día, al partir, habremos de recorrer.
14 comentarios:
Qué mala noticia che.
Igualmente pensá que preguntándote "qué hubiera pasado si..." no vas a llegar muy lejos. Te estarías planteando un problema que no tiene solución. Acordate lo que dicen los budistas: Si el problema tiene solución, ¡No te preocupes, ya la vas a encontrar!, y si no tiene solución, ¡No te preocupes, no hay nada que puedas hacer al respecto!
Sip, en realidad esto pasó la semana pasada, recién lo colgue hoy. Las preguntas surgen solas, sé que no tienen respuestas más allá de lo hipotético, pero uno siempre termina haciéndoselas por más que no llegue a nada en concreto. Sólo me salió escribir lo que escribí, eso es todo.
Gracias por la frase.
Salutes
Así es la vida. Así es la muerte. Impactan esas noticias que a uno lo ponen en la certeza de que es demasiado pequeño ante tanta inmensidad.
Nunca se sabrá bien las causas. El suicida es poeta, no filósofo. Y en cada uno de sus versos habrá dejado su destino establecido.
Siempre tuve un sentimiento encontrado con respecto al suicidio. Por un lado, no dejo de creer que es una salida, digamos, apresurada. Pero por otro siento que es el unico acto de eso que llaman "free will". Algo asi como, "no pude elegir la fecha de mi nacimiento, pero si puedo elegir la de mi muerte".
Lo extraño es que siempre el suicidio esta asociado a la idea de dolor, de malestar, de lo no soportable de la vida.
Y si tal vez, solo tal vez, HG sintio que ya habia hecho todo lo que tenia que hacer por estos lares? Si encontro su mision hace años y la cumplio? En todo caso, tal vez, solo tal vez, todo la historia no sea tan dolorosa.
Por lo demas, mas temprano que tarde, supongo que se lo podremos preguntar. O siemplemente comprender.
SALUDOS
Adrián: Me pareció bellísimo cómo volcaste ese pensamiento en palabras escritas.
"El suicida es poeta, no filósofo. Y en cada uno de sus versos habrá dejado su destino establecido."
Genial
Luis: Es interesante lo del libre albedrío, onda que eso es así, vos tenés libertad para elegir hacer lo que quieras, incluyendo elegir tu propia muerte. Eso no se discute y está bárbaro que así sea. Después de todo el libre albedrío es el concepto más genuino que tenemos de libertad.
En el caso del suicidio creo en cambio que siempre va asociada la idea del dolor, la ignorancia, el desasosiego y la desesperanza; puede ser dolor por la vida, dolor por amor, dolor por desamor, etc.
Volviendo a tu comment creo que sólo un iluminado sabría cuando terminó su misión en este mundo, y si decimos iluminado estamos hablando de alguien que llegó a la Verdad final entendiendo finalmente para qué está en este plano, y hasta donde sé, de los iluminados (me refiero a los avatares) que pasaron por este planeta ninguno se quitó la vida por voluntad propia, como que creo que eso va en contra de las leyes naturales, y un iluminado eso lo sabe y no se arriesgaría a dejarse caer por eso, es más, aventurándome más aún en lo que creo, siento como que jamás se le cruzaría la idea por la cabeza.
Recuerdo haber leído textos budistas en donde dicen que no hay nada peor para un iluminado que seguir vivo entre las dualidades planteadas en este mundo de ilusiones habiendo logrado ya el objetivo de desapegarse de todo y habiendo trascendido a dicha dualidad, objetivo que todos tenemos en esta vida, bah, me corrijo, todos los que creemos en ese objetivo.
Salutes
Juan, si me permitís, me gustaría proponerte otra asignación alternativa a la que pusiste en el post.
¿Qué te parece:
objHJ == NULL;
La idea de Nothing me da la impresión de algo que NO ES. En cambio el null, en lenguaje computacional al menos, es más parecido a no asignado, o a indeterminado. Me parece que suena mejor. ¿Quién diría que todavía sigo encariñado con el 'C'?
Pienso en el Suicidio y la primera palabra con la que lo asocio es con Auxilio.
Creo también también que para que una persona llegue a términos tan extremos debe estar completamente falta de esperanza, de fe, de sentido. Es la pesadumbre de creer o sentir que la vida no tendrá otros colores o alternativas .Que no habrá cambio.
Coincido con Luis cuando dice que es una salida un tanto apresurada....
Como hija y nieta de una madre y un abuelo suicidas, me perseguí mucho años con este tema. Investigué, busqué razones , y más alla de que puede ser el resultado de alguna patología mental, el suicidio es un intento último de cambio y el resultado de un largo proceso de desconexión con el mundo.
Un dato curioso es que el suicida siempre se identifica con otro suicida , por ejemplo, Margot Hemingway se identificaba con su abuelo Ernest. Mi madre con Alfonsina Storni, por años fue casi su obsesión , y mi abuelo con su hija.
Un beso.
Martín: Aceptada la asignación, a eso iba cuando en el post traté de remarcar eso que acá cada cual le da la interpretación que más le cierre o que mejor sienta como válida, de todas formas la respuesta final al dilema es algo que todavía no sabemos, pero paciencia que ya nos enteraremos. Salutes.
Caro: Recuerdo cuando me contaste tu historia, y sé que este tema te toca muy de cerca. Pasa que en un tema así es bueno pensar y divagar (sólo un poco) tratando de encontrar respuestas, pero que en el mayor de los casos sólo son visiones individuales que tenemos sobre el asunto. Besos para vos.
Hey si hasta alguna vez yo imaginé mi suicidio.
Muy buen (y triste) relato. Ayer vi una pelicula muy buena que justamente trata sobre el suicidio de manera magistral. La pelicula se llama Mar Adentro (de Alejandro Amenabar). Mas que contarselas yo, se las recomiendo que la vean.
Yo no descartaria completamente el nothing. (por esa cosa de que sin la nada no podria existir el todo)
un saludo
Caramba...que jodido lo que paso.....a mi me paso con una persona muy cercana....todo parecia estar bien.....sin problemas....una persona con trabajo..joven...con futuro....salud envidiable....y un dia como cualquier otro amanecio colgado de una escalera....sin cartas ni explicaciones....solo la tarea a cada uno de los que nos quedamos de entender el porque.......¿que es lo que los lleva a eso?......y me resuenan las palabras de Viernes 3AM....."siempre igual los que no pueden mas se van"......creo que solo ellos pueden entenderlo (sea donde sea que esten) y que nosotros solo podemos aceptarlo y evaluarlo....asimilarlo....porque en estos casos no hay protestas ni quejas que valgan.....
¿cual sera el factor desencadenante?....¿como seran esos momentos previos?....cuantas preguntas
Siento que el suicidio está relacionado en primer lugar con el dolor y con idea de la incapacidad para superarlo. Si uno piensa que determinada situación de dolor será perpetua quizás empiece a pensar que la única manera de salir de ella es matándose.
Lo veo como si fuera la proyección de una película que se quedó trabada en un fotograma de una escena de dolor: uno empieza a pensar que ésa es la única realidad (la del fotograma) y se olvida del movimiento que subyace y que es su razón última de ser(la película completa). Para continuar con esta metáfora cinematográfica: ¿qué pasa cuando una proyección se traba en un fotograma? Se empieza a quemar la película, se derrite por el calor de la luz del proyector: es decir, cada fotograma está hecho para durar una fracción de segundo, no para permanecer estático.
Hace falta un buen grado de madurez para empezar a darse cuenta de que la Vida es movimiento; y se sabe que nadie nace maduro, que nos vamos haciendo en el camino.
Lo paradójico, y lo digo con mucho respeto hacia las personas que se quitaron la vida, es que el que se suicida está haciendo un intento desesperado por vivir. Ama la vida tanto que dice: "si no puedo vivir como quiero plenamente me mato".
Creo que permitirse el deseo del suicidio o pensar en él es algo legítimo y un derecho; de ahí a pasar al acto hay una distancia enorme, y es en ese trayecto que uno puede reflexionar, analizarse, conocerse y modificar las cosas que a uno no le gustan de su vida. Es, quizás, ése el gran camino que uno tantas veces quisiera evitar, el de aceptarse como uno es. Algo que parece tan sencillo y puede ser tan complejo. Después de todo, las trampas al conocimiento de uno se las pone uno mismo. Un profesor de Filosofía nos dijo en una clase "las cadenas más sólidas son las que uno mismo se forja". Claro, quién mejor que uno conoce sus puntos débiles. Pero, ¿y si uno usase ese conocimiento para forjar herramientas en vez de cadenas? Herramientas o instrumentos para ser más conciente en las mínimas elecciones de la vida. A lo mejor la sumatoria de esas pequeñas decisiones forme algo parecido a la alegría y a las ganas de seguir viviendo.
genial lo de cerebro magnetico.
Daniel: Mar Adentro, una gran película, coincido, la vi hace tres meses y es altamente recomendable. Y el poema de Sampietro que da el título a la película es simplemente genial.
Salutes.
Paula: He leído en tu blog varios post referidos a esa persona y creo entender cómo te pegó esa decisión que él tomó. Te mando un abrazo.
Cerebro Magnético: Coincido con Daniel K., muy buena tu metáfora y el paralelismo cinematográfico que explayaste. Con respecto a lo que escribiste de cuando se quema un fotograma me hizo recordar a una frase de uno de los suicidas que admiré cuando era adolescente: Kurt Cobain (Nirvana), que dejó escrito antes de matarse algo así como: "Más vale arder de repente que consumirse poco a poco."
Salutes y bienvenido al blog.
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